
Esta población originaria se ubica en el oeste formoseño, a 16 kilómetros de la localidad de Pozo de Maza.
Allí agentes y profesionales sanitarios ofrecieron nuevamente a los vecinos: atenciones integrales de salud para todas las edades con hincapié en los controles a niños, embarazadas, adultos mayores y pacientes con factores de riesgo o patologías diagnosticadas.
Vacunación y chequeo personalizado
Desde el equipo interviniente comentaron que gran parte de las tareas giró a instancias de vacunación con el chequeo personalizado de cada carnet de vacunas, entrega de leche y medicamentos, además consejería sobre planificación familiar y entrega de métodos anticonceptivos disponibles.
Las consultas médicas incluyeron: toma de tensión arterial; control de glucemia; medición de estatura, peso y talla; chequeo de la temperatura corporal y otros tantas evaluaciones clínicas en recién nacidos, niños, adultos, adultos mayores y embarazadas.
Al tiempo, desde el área de obstetricia mencionaron que en las embarazadas se practicaron los controles prenatales de rutina como: medición uterina, latidos fetales también registro del peso y la aplicación de las vacunas que estipula el calendario para ellas y se programaron turnos para la realización de las ecografías trimestrales.
Seguidamente fueron entregados también de manera gratuita: cajas de leche para niños y embarazadas; y los medicamentos recetados por los profesionales. En tanto que se realizó coordinadamente la gestión de turnos programados para los pacientes que requerían una atención determinada para cada especialidad.